Los ecologistas han conseguido paralizar la caza del lobo en Castilla y León y Cantabria, y ya se preparan para intentarlo también en Asturias. El Tribunal Superior de Castilla y León ha dado la razón a la Asociación para la Conservación y Estudio del Lobo Ibérico (Ascel), y ha aplicado la medida cautelar solicitada por ese colectivo para suspender el plan de aprovechamientos comarcales de lobo en los terrenos cinegéticos situados al norte del río Duero para el período 2016-2019.